Imprimir

La primera aparición de la Virgen de la Medalla Milagrosa en primera persona volumen 2

Por: Rafaela Randello

Durante el año 1876, cercana a su muerte. Santa Catalina Laboure volvio a escribir, tambien por obedencia, otros dos relatos en los que trata de decir no los hechos sino las palabras de la Virgen en la primera aparicion que sucedio la noche del 18 de julio de 1830.

1830, 18 de julio, encuentro con la Santísima Virgen, desde las 11 horas hasta la 1, 30 de la mañana del día 19, San Vicente.

Hija mía, el buen Dios quiere confiarte una misión. Sufrirás mucho, pero lo superarás pensando que lo haces por la gloria del buen Dios. Sabrás lo que es el buen Dios, y eso te atormentará hasta que lo digas a quien tiene a cargo suyo tu guía (el P. Jean-Marie Aladel). Te contradirán, pero tendrás la gracia, no temas, dilo todo con confianza y sencillez. Verás ciertas cosas, cuéntalas. Te sentirás inspirada en la oración.
Corren muy malos tiempos. La desgracia va a caer sobre Francia, el trono será derribado, sacudirán al mundo entero infortunios de toda clase (la Santísima Virgen tenía la expresión muy apenada al decir esto), pero venid al pie de este altar, donde se derramarán gracias sobre todas las personas que las pidan con confianza y fervor, sobre los grandes y los pequeños…

Hija mía, gusto particularmente de derramar gracias sobre la Comunidad: la amo mucho. Siento dolor, pues hay grandes abusos: no se observa la Regla, la regularidad deja que desear, hay gran relajación en ambas Comunidades. Dilo a quien se encarga de ti, aunque no sea superior. Dentro de poco se le encomendará la Comunidad de modo particular. Tiene que hacer cuanto esté en su mano para poner de nuevo en vigor la Regla, díselo de parte mía… Que vigile las malas lecturas, la pérdida del tiempo y las visistas… cuando la Regla haya sido restaurada en su vigor, otra Comunidad se unirá a la vuestra. Eso no se acostumbra, pero yo la amo…, di que se la reciba. Dios las bendecirá, y gozarán de una gran paz. La Comunidad se hará grande…

Sobrevendrán grandes males, el peligro será grande: no temas; el buen Dios y San Vicente protegerán a la Comunidad… (la Santísima Virgen seguía triste): yo misma estaré con vosotras, siempre he velado por vosotras. os concederé muchas gracias… Llegará un momento de gran peligro, cuando se dará todo por perdido; estaré entonces con vosotras, tened confianza, reconoceréis mi visita y la protección de Dios y de San Vicente sobre ambas Comunidades.

Mas no será lo mismo con otras Comunidades, habrá víctimas (la Santísima Virgen tenía lágrimas en los ojos al decir esto), en el clero de París habrá muchas víctimas, monseñor el Arzobispo morirá. Hija mía, la cruz será despreciada, la sangre correrá por las calles (aquí la Santísima Virgen ya no podía hablar, la tristeza llenaba su rostro). Hija mía, me dijo, todo el mundo estará sumido en tristeza.
Yo pensaba cuándo será esto: 40 años, y 10 años después de la paz.
Un día le dije al P. Aladel: La Santísima Virgen quiere que usted comience una Asociación de la que será fundador y director. Una Asociación de Jóvenes de María: la Santísima Virgen le concederá muchas gracias y se le otorgarán indulgencias. El mes de María se celebrará con gran solemnidad en todas partes. El mes de San José también se celebrará con mucha devoción, será grande la protección de San José. También habrá mucha protección y devoción al Sagrado Corazón de Jesús.

FUENTES:

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Tabla de contenidos